Enfoque selectivo, una útil técnica y recurso compositivo
febrero 12, 2024Un "error" habitual cuando empezamos con esto de la Fotografía es el de realizar fotos donde muchos elementos parecen tener el mismo nivel de importancia. A veces hacemos capturas donde no hay una jerarquía visual que le "diga" al espectador dónde debería mirar o qué es lo que le querías "señalar" o "contar" con tu foto.
En muchas de las fotos que hacemos (siempre hay excepciones) deberíamos decidir cuál es el elemento, el sujeto, el "loquesea", más importante y realizar la composición de tal manera que lo resalte lo suficiente sobre el resto.
Hay muchas maneras de conseguir atraer la atención del espectador sobre algo en concreto de nuestras fotografías, te hablé por encima de varias técnicas para dirigir la mirada en un artículo llamado "10 recursos compositivos que anulan la regla de los tercios". La nitidez es uno de esos recursos y "enfoque selectivo" es el nombre más extendido para el mismo.
Hoy vamos a profundizar en esa herramienta y vamos a aprender muchas cosas interesantes y útiles sobre ella...
¿Qué es el enfoque selectivo?
Imagina una foto de una flor rodeada de arbustos. La flor estaría enfocada, nítida y llena de detalles perfectamente visibles, mientras que los arbustos de alrededor y el fondo se ven difuminados, se ven borrosos o desenfocados.
Pues eso es el enfoque selectivo.
Básicamente se trata de enfocar solo una parte de la escena y desenfocar el resto.
Concretamente enfocar al sujeto sobre el que quieres llamar más la atención o que quieres que sea el protagonista de tu fotografía.
Pero no basta solo con enfocar, necesitas un conocimiento técnico que se llama "profundidad de campo" y que está directamente relacionado con la "abertura de diafragma" y con cosas como el bokeh, pero más adelante entramos en eso, primero te voy a contar que...
¿Por qué necesitamos este tipo de recursos?
Principalmente porque la percepción humana es muy selectiva en el mundo real, pero lo "ve todo", le da la misma importancia a todo, cuando observa una imagen.
Supongo que alguna vez te ha pasado algo parecido a:
Estás hablando con una persona que conoces y no te enteras de lo que ocurre a tu alrededor, hasta que al terminar la conversación te das cuenta de que tu hermano está haciendo aspavientos dentro de tu campo de visión, pero no te habías percatado hasta ese momento (sí, me paso, es una historia real, también es que yo soy muy despistado, todo hay que decirlo).
Pues en este caso y en muchos más se están dando recursos que reclaman tu atención con diferentes intensidades e intenciones. Pero lo importante es que no eres capaz de verlo o escucharlo todo al mismo tiempo, tu mente va decidiendo a qué prestarle atención
Eso en el mundo real, en tres dimensiones, pero cuando observamos una imagen no funciona así la cosa.
De hecho, si en alguna de ese tipo de situaciones se hiciera una foto, verías en ella perfectamente a la persona que está teniendo la conversación contigo, pero también perfectamente a tu hermano haciendo aspavientos y a todo el que estuviera pasando por la calle.
A no ser que al realizar esa fotografía se aplicasen algunos de los recursos compositivos que pueden afectar a tu percepción y atención.
El enfoque selectivo es uno de ellos y quizás de los más propios de la Fotografía, ya que prácticamente nación con ella, pero eso te lo contaré después, primero y antes que nada...
¿Para qué sirve el enfoque selectivo?
El enfoque selectivo lo has estado utilizando desde que empezaste en la Fotografía y sin saberlo has venido usando uno de los recursos compositivos más útiles para dirigir la mirada del espectador, crear jerarquías y sensación de tridimensionalidad, entre otras.
Así que el enfoque selectivo sirve para cosas como...
Destacar el sujeto principal
Al mostrar nítido y con todo lujo de detalles a un sujeto (o a parte de este) consigues hacerlo destacar claramente sobre el resto de elementos que estarían desenfocados.
Cuanto mayor sea la diferencia de nitidez, más patente quedará cuál es el sujeto o elemento que quieres potenciar.
Dirigir la mirada
Guía la mirada del espectador hacia el punto de mayor interés porque nuestra percepción descarta las cosas que carecen de detalles y presta atención a lo que es rico en ellos. Piensa en cuando miras al cielo, no te paras a observar las zonas despejadas, sino que tu vista salta de una nube a otra, que son los elementos con textura y detalle.
El enfoque selectivo hace eso mismo, resta detalle a lo que no es importante, así la mirada se va hacia los elementos nítidos, le está diciendo a nuestra mente: "Descarta esto, fíjate en esto otro".
Eliminar distracciones
Normalmente en el mundo real, en tres dimensiones hay muchos elementos, muchas cosas que quieren atraer la mirada del espectador. En muchas ocasiones no podemos encontrar un encuadre adecuado que aísle al sujeto principal del resto de elementos y lo haga destacar, como por ejemplo un fondo despejado o un buen enmarcado.
Gracias al enfoque selectivo eliminamos esas distracciones. Al difuminar los elementos que no aportan valor a la foto, especialmente los que forman parte del fondo y que se solapan en nuestra imagen con el sujeto principal, hacemos que éste destaque sobre los demás.
Añadir profundidad
Uno de los "problemas" de la Fotografía es que representa un mundo tridimensional (alto, ancho y profundo) en un formato bidimensional (alto y ancho de la pantalla o el papel).
El enfoque selectivo, a través de la profundidad de campo, permite, hasta cierto punto, crear la ilusión de profundidad en nuestra imagen. Nuestra mente interpreta que lo enfocado es "lo que estamos mirando" y lo desenfocado es lo que se aleja o acerca a nosotros desde ese plano, cuanto más desenfoque más lejano de lo que "ha llamado nuestra atención".
Conseguir el efecto"Bokeh"
Bueno, en realidad no es un efecto sino una manera de llamar al desenfoque...
Aunque no me voy a detener en este punto, ya que publiqué un artículo muy completo llamado '¿Qué es el Bokeh y cómo puedo hacerlo?'.
¿Cómo se logra el enfoque selectivo?
La clave está en la profundidad de campo, de la que te he hablado extensamente en un capítulo de mi curso gratuito de iniciación a la Fotografía y en mi canal de YouTube, en un capítulo del curso que hice durante la pandemia. Te dejo ambos aquí enlazados:
- Curso de Fotografía en el blog: 14. Profundidad de campo.
- Curso de Fotografía en YouTube: 9. La profundidad de campo y la hiperfocal
Te recomiendo echarle un ojo a esos enlaces, pero por si no te apetece estar yendo y viniendo a artículos y vídeos, te hago un resumen de lo más esencial...
La profundidad de campo es la distancia que hay entre el plano más cercano y el más lejano de la escena que se ven aceptablemente nítidos en nuestra fotografía.
Cuando enfocamos no lo hacemos a punto en concreto, ni a un objeto, enfocamos a un plano que situamos a cierta distancia de nosotros, como si de una "barrera" mágica e invisible se tratase.
Ese plano al que enfocamos o esa distancia a la que se para nuestro plano de enfoque, es la única zona totalmente nítida de nuestra foto... todo lo que se se aleja (hacia el horizonte y hacia nosotros) va perdiendo nitidez progresivamente hasta estar totalmente desenfocado. Lo que vemos aceptablemente nítido, es lo que llamamos "Profundidad de campo" (o PdC o Depth of Field o DoF).
La profundidad de campo la podemos agrandar y empequeñecer gracias a varios factores y para conseguir el enfoque selectivo necesitamos que la profundidad de campo se muy pequeña, cuanto más pequeña sea, más selectivo será ese enfoque.
Los factores que modifican la profundidad de campo
Hay varios factores que influyen en la profundidad de la profundidad de campo, para lograr un buen enfoque selectivo necesitamos conocerlos:
- La abertura de diafragma:
Cuanto más abierto esté el diafragma (valor "f" menor) más pequeña será la profundidad de campo. En cambio, cuanto más cerrado esté el diafragma (valor "f" mayor") más grande será la profundidad de campo. - La distancia focal:
Cuanto mayor sea la distancia focal (mayor nivel de zoom) más pequeña será la profundidad de campo. Por contra, cuanto menor sea la distancia focal, (menos zoom) más grande será la profundidad de campo. - La distancia al sujeto:
Cuanto más cerca estés de lo que estás enfocando, menor será la profundidad de campo, pero cuanto más lejos estés del plano de enfoque, mayor será la profundidad de campo.
Así que si queremos hacer "muy selectivo" el enfoque selectivo, necesitamos reducir considerablemente la profundidad de campo, por lo que, en resumen:
- Abre mucho el diafragma.
- Haz mucho zoom.
- Acércate al sujeto.
- Cuanto más lejos estén el fondo y otros elementos de nuestro sujeto, más desenfocados estarán, por lo que más pronunciada será la diferencia de nitidez y más evidente será el enfoque selectivo.
En qué casos es útil el enfoque selectivo...
El enfoque selectivo es una técnica compositiva muy versátil, relativamente fácil de aplicar y que se puede utilizar en una gran variedad de situaciones.
Algunos ejemplos de casos en los que es especialmente útil:
- Retratos:
El enfoque selectivo te permite destacar, por ejemplo, los ojos del sujeto, que suelen ser la parte más importante del retrato.Y también es habitual utilizarlo para difuminar el fondo y crear un efecto que aísla al sujeto o lo separa del fondo.
- Fotografía de aproximación y Macro:
En la fotografía macro, el enfoque selectivo es casi inevitable, debido a la propia construcción de los objetivos y las mínimas distancias a las que se enfoca.Pero lo podemos usar en nuestro beneficio para enfocar un pequeño detalle de un sujeto y resaltarlo de una forma muy llamativa. - Paisajes y naturaleza:
En fotografía de paisajes, es habitual tirar del efecto contrario, la hiperfocal (en la que todo está aceptablemente nítido).Pero podrías tirar de originalidad y creatividad y usar el enfoque selectivo para destacar un primer plano, como una flor o un árbol, y difuminar el fondo para crear una interesante sensación de profundidad. - Fotografía callejera:
Otro caso en el que, como en paisaje, es habitual utilizar la hiperfocal o, al menos, una profundidad de campo bastante amplia.Pero si usas el enfoque selectivo, de una manera controlada, en fotografía callejera podrías enfocar a una persona o un objeto en una escena concurrida y desenfocar el resto para aislarlo del resto sin perder el contexto.
- Fotografía de producto y bodegón:
En este caso el enfoque selectivo se suele utilizar de una manera muy controlada, para que todos los elementos del bodegón aparezcan nítidos, pero el fondo desenfocado, no siempre es así, pero sí es muy común.El caso es que así consigues destacarlos y que no haya otros elementos que distraigan la atención o le roben protagonismo. - Fotografía artística:
El enfoque selectivo también se puede utilizar de maneras creativas. Quizás podrías desenfocar el que es supuestamente el sujeto principal y que lo nítido sea el resto.O hacer encuadres muy cerrados, muy próximos al sujeto, enfocando alguna parte de éste y creando una sensación de intimidad, incluso en ocasiones de ensueño.
En general, el enfoque selectivo es una herramienta compositiva muy útil en muchísimas situaciones en las que quieras destacar, aislar, resaltar un sujeto o crear una sensación de profundidad en tu imagen.
Y para terminar...
El enfoque selectivo es un recurso propio de la Fotografía
Esto que te voy a contar es más una curiosidad que algo realmente útil, pero ya que somos gente a la que nos mola mucho la Fotografía, seguro que esto lo usaremos en alguna conversación...
El enfoque selectivo es muy curioso, porque imita bastante bien el comportamiento de nuestra visión, aunque más bien lo que imita es cómo nuestra mente percibe. Ya que nosotros solo vemos desenfocadas las cosas que están excesivamente cerca, todo lo demás es como si lo viésemos con hiperfocal. Es nuestra mente la que descarta o "desenfoca" los elementos (cercanos y lejanos) a los que no estamos prestando atención.
El caso es que el recurso compositivo del "enfoque selectivo" nació con la Fotografía.
Antes de que nuestra disciplina llegase a la historia del Arte, en las imágenes, pintadas o dibujadas, todo estaba "nítido", la manera de resaltar a un sujeto era a través de otras herramientas como el color, la luz o los elementos básicos de la composición, entre otras.
Por otra parte, la sensación de tridimensionalidad se lograba a través de artificios como la perspectiva lineal o la atmosférica, no con el desenfoque. Quizás en ocasiones se dejaba con menos detalles elementos lejanos o menos importantes, pero no era lo mismo que el efecto de borrosidad y desenfoque que aportó la Fotografía.
El desenfocar fondos y sujetos, la profundidad de campo al fin y al cabo, es consecuencia de los componentes ópticos de nuestras cámaras y de cómo la luz se comporta al atravesarlos.
No se había visto nunca hasta que las primeras fotos lo mostraron. Y más adelante, disciplinas como la Pintura y el Dibujo, lo imitaron e incorporaron.
Así que creo que es una buena manera de terminar este artículo el haberte hecho ver que la Fotografía también ha aportado cosas a la historia del Arte, no solo he bebido de ella.
Espero que esta entrada te haya resultado útil e interesante y que la compartas en tus redes sociales para ayudarme a llegar a más gente. Si quieres contarme algo, lo hagas a través de los comentarios un poco más abajo.
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Un saludo y buena luz.
2 comentarios
Muy explicado, como siempre, Carlos. Solo un detalle, debes corregir el siguiente párrafo: "Cuanto mayor sea la distancia focal (mayor nivel de zoom) más pequeña será la profundidad de campo. Por contra, cuanto mayor sea la distancia focal, (menos zoom) más grande será la profundidad de campo."
ResponderEliminarMuchas gracias Paco, ya está corregido 😉👍
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