Curso de Lightroom - 12. Biblioteca - Flujo de trabajo
mayo 31, 2018Capítulo 12 del curso de Lightroom y último del módulo "Biblioteca". Te voy a contar mi flujo de trabajo para llevar las fotografías de la cámara de fotos a este programa, cosa que nos servirá como resumen y repaso de lo que hemos visto hasta ahora.
El capítulo anterior, el número 11, fue el último correspondiente al bloque de artículos relacionados con el módulo "Biblioteca" de Adobe Lightroom. En él vimos cómo localizar nuestras fotografías en segundos gracias al "Filtro de biblioteca", una potente herramienta que de forma sencilla nos permite tener un gran control sobre todo nuestro archivo fotográfico.
Pero para que fuese realmente efectivo debíamos haber puesto de nuestra parte previamente, por ello he dividido en tantos capítulos el curso, cada uno corresponde a un aspecto del programa que debemos conocer y controlar si queremos tener nuestras fotografías adecuadamente importadas, organizadas, clasificadas y etiquetadas.
Sé que se trata de mucha información, pero no deberías encontrarte con demasiadas dificultades si has ido leyendo cada artículo con atención, aplicándolo después o incluso con el programa abierto y practicando al mismo tiempo.
De todas formas me tienes disponible en los comentarios de cada uno de los capítulos para resolver cualquier duda que te surja, como ya saben varias de las personas que siguen el curso.
Qué vamos a ver hoy
Para hacer un repaso y una especie de resumen de todo lo que hemos ido viendo, he decidido escribir y publicar la entrada de hoy antes de meterme con el revelado.
Se trata de un artículo en el que te voy a describir mi flujo de trabajo a la hora de llevar las fotografías desde la cámara hasta el programa y cómo las organizo, las etiqueto, clasifico e incluso califico.
Para ello voy a utilizar las fotografías de una de las tarjetas de memoria que me he traído de mi reciente viaje a Lisboa. En total he vuelto con dos tarjetas de unos 32gb (nah menos) llenas de imágenes de esta interesante capital. Ha sido una aventura muy enriquecedora, acompañado de mis mejores amigos y mi esposa, que no dudaremos en volver a repetir cuando se presente la ocasión. Espero publicar una entrada sobre el viaje dentro de poco tiempo.
Este periplo es el motivo de que esta semana sólo hay un artículo nuevo en el blog y parte de la razón de que la semana que viene hagamos una pausa en el curso.
Pero eso te lo cuento al final de esta entrada, por el momento vamos a ver cómo trabajo con Lightroom y las nuevas fotografías...
La seguridad, lo primero...
No, no te estoy diciendo que te pongas casco, guantes y gafas o que sea peligroso importar fotografías, quizás hacerlas lo sea en ciertas ocasiones, pero no es un tema que estemos tratando en este artículo. Tampoco hablo de las copias de seguridad o "backups", este tema sí que lo trataremos en uno de los últimos capítulos del curso, casi al final.
De lo que hablo es de asegurarte de no perder fotos que ya estén en la tarjeta de memoria de tu cámara.
Para ello te cuento algunas recomendaciones que yo me autoimpongo...
1. Nunca borro desde la cámara
Las fotografías que hago casi nunca las elimino en la cámara, de hecho pocas veces reviso las fotos que he tomado mientras estoy fotografiando.
Espero a verlas en el monitor del ordenador.
En prácticamente todas las ocasiones hago una primera fotografía que compruebo, si es necesario hago cambios, si todo está correcto sigo trabajando. Sé que las fotos siguientes van a estar expuestas como quiero a partir de la primera, si no cambia la luz y hasta que no pasa totalmente la "acción" de la escena que esté fotografiando no me entretengo en revisarlas.
Una vez que ya sé que no va a pasar nada más, reviso rápidamente, no para ver las fotos que están mal hechas ni para borrarlas, sino para confirmar que tengo la que quiero.
Lo de revisar y borrar las fotos lo hago, como ya te he dicho, en el ordenador.
Además te habrá pasado alguna vez que una imagen que ves en cámara te parecía fantástica y al verla en el monitor no te ha parecido para tanto o está borrosa o trepidada o con cualquier otro fallo, pues al contrario también pasa. Una foto que te parece mala o mal hecha puede darte una sorpresa al verla en tu monitor y viceversa.
2. Nunca lleno totalmente una tarjeta de memoria
Es una recomendación de esas que nunca he llegado a comprobar si es válida o no, pero por si acaso la cumplo.
Un amigo informático me comentó en una ocasión que siempre debemos dejar cierto espacio en la tarjeta, no es recomendable llenarla del todo porque nos arriesgamos a provocar ciertos fallos.
Por ello cuando veo que para llenar la memoria me quedan una o dos decenas de fotos, cambio de tarjeta.
3. Prefiero varias tarjetas de menos capacidad que una de mucha
Siempre llevo varias tarjetas, actualmente entre cuatro y seis, la mayoría de 32gb y algunas de 16gb.
Esto se debe a que las tarjetas se estropean, normalmente en el peor momento y prefiero perder "sólo" 32gb a 128gb en fotografías... me entran sudores fríos nada más pensándolo.
Además las tarjetas que uso son de calidad probada, no ha sido una única ocasión en la que algún conocido me ha llegado pidiendo ayuda porque una memoria se le ha estropeado y cuando pregunto el origen o marca de la misma me dicen que de las tiendas de "Todo a 100".
Estas son algunas de las tarjetas de memoria que yo uso...
Sé que las hay más baratas y con calidad suficiente, pero las que te pongo aquí arriba tienen varias características que las hacen mejor opción que otras, como su velocidad de lectura y escritura de datos, su garantía o el programa de recuperación que incluyen en la web del fabricante.
Además las tarjetas que uso son de calidad probada, no ha sido una única ocasión en la que algún conocido me ha llegado pidiendo ayuda porque una memoria se le ha estropeado y cuando pregunto el origen o marca de la misma me dicen que de las tiendas de "Todo a 100".
Estas son algunas de las tarjetas de memoria que yo uso...
Sé que las hay más baratas y con calidad suficiente, pero las que te pongo aquí arriba tienen varias características que las hacen mejor opción que otras, como su velocidad de lectura y escritura de datos, su garantía o el programa de recuperación que incluyen en la web del fabricante.
4. Bloqueo la tarjeta un vez la saco de la cámara
Todas las tarjetas tienen una pestañita física para bloquearlas que sirve para que no se puedan borrar ni grabar más datos en ellas.
Así que una vez que saco la tarjeta de la cámara, la bloqueo y guardo en un lugar específico de mi bolsa, reservado para las tarjetas ya usadas. Acuérdate de desbloquearlas cuando las vayas a volver a usar.
Así que una vez que saco la tarjeta de la cámara, la bloqueo y guardo en un lugar específico de mi bolsa, reservado para las tarjetas ya usadas. Acuérdate de desbloquearlas cuando las vayas a volver a usar.
Esos dos pasos me aseguran que no utilizaré una tarjeta llena por error.
5. No borro, formateo la tarjeta
Una vez importadas las fotografías y realizadas las copias de seguridad, formateo la tarjeta. Ojo, sólo cuando estoy seguro de tener las 2 (como mínimo) copias de seguridad que siempre hago.
Formatear dicen que alarga la vida de las tarjetas, pues así no acumulan los archivos "basura" que se quedan al borrar las fotos en bloque o una a una.
Esas 5 normas autoimpuestas me aseguran no perder tontamente fotografías. Después de este pequeño (pero creo que útil) inciso, seguimos con el proceso...
Leer los datos de la tarjeta de memoria
Para conectar la tarjeta al ordenador, la saco de la cámara y utilizo un lector de tarjetas.
No lo hago directamente conectando la cámara de fotos porque no me fío de los cables... llamadme obsesivo... que sí que lo soy... pero temo una subida de tensión mientras está la cámara enchufada, me preocupa un posible tirón del cable de mis hijos jugando cerca, me da miedo un fallo del cable justo cuando se está importando la mejor de las fotografías, me aterrorizan las muñecas de porcelana en las almohadas, me dan cierto miedo las alturas y mi mujer cuando se enfada... estoooo, que se me va, que estamos hablando de fotografía...
El caso es que prefiero guardar la cámara en lugar seguro y usar mi lector de tarjetas para importar las fotografías.
En la ventana de importación
Si quieres repasar el proceso completo para la importación tienes dos capítulos para eso, uno donde explico cómo hacer la importación inicial y otro donde hablo sobre dos alternativas a la hora de importar, reorganizar nuestro archivo o mantenerlo como está. Así que, como con el resto de puntos, no me entretendré demasiado.
Abro Lightroom y le doy al botón de "Importar".
Elijo el "Origen", que casi siempre será la tarjeta de memoria que aparecerá entre los dispositivos disponibles.
Copiar como DNG, Copiar, Mover o Añadir
Selecciono la opción "Copiar"... no "Mover" porque me quitaría las fotos de la tarjeta y quiero conservarlas hasta el final del proceso. Tampoco "Copiar como DNG" porque no quiero hacer una conversión del RAW. Tampoco "Añadir", primero porque no se puede hacer desde una tarjeta de memoria, y segundo porque si me lo permitiese implicaría que los archivos originales no estarían en mi ordenador tras la importación, sólo estarían en la tarjeta.
Así que "Copiar", que me produce una copia de los archivos originales en el lugar de mi ordenador que después decidiré pero también los conserva en la tarjeta de memoria hasta que yo quiera formatearla.
Desmarcar las insalvables
Una vez aparecen las miniaturas de las fotografías en la ventana central de este panel de importación, las selecciono todas con el botón correspondiente y hago una revisión rápida.
En esta revisión sólo desmarco las que son totalmente e indudablemente insalvables.
No desmarco las similares a otras, ni siquiera las repetidas, ni las "malas" ni las dudosas. Sólo las que tengo la absoluta certeza de que no se puede hacer nada con ellas y aún así en muchas ocasiones espero a verlas en el módulo "Biblioteca".
No desmarco las similares a otras, ni siquiera las repetidas, ni las "malas" ni las dudosas. Sólo las que tengo la absoluta certeza de que no se puede hacer nada con ellas y aún así en muchas ocasiones espero a verlas en el módulo "Biblioteca".
Elegir el destino
Después selecciono el destino, que en mi caso es un disco duro externo dedicado exclusivamente a mi trabajo de fotografía, que contiene una carpeta llamada "Fotos".
Este disco duro tiene otras carpetas destinadas a los catálogos y a las exportaciones. Pero para importar las fotos elijo la carpeta correspondiente.
Normalmente estará ya configurado ese destino, ya que se mantiene de una importación a otra a no ser que lo cambiemos.
Varias comprobaciones
Como te acabo de decir, la mayoría de las opciones se mantiene de una importación a otra, así que sólo tengo que comprobar varias cosas...
- Selecciono "Crear previsualizaciones 1:1"
Para que las previsualizaciones tengan el mismo tamaño de la copia original, lo que me da más fluidez a la hora de trabajar con ellas y también una capa de seguridad, pues con esta acción tengo una copia en jpg del mismo tamaño que el archivo original en cierta ubicación del equipo (ya te contaré este truco). - Marco "No importar supuesto duplicados".
Lo marco para que me desmarque las fotografías que ya tengo importadas de veces anteriores. Así no se crean duplicados innecesarios de las fotografías originales. - Compruebo "Cambiar nombre de archivos"
Me fijo si está seleccionado "Ajustes a medida", que configuré para que al principio del nombre del archivo original me añadiera la fecha de toma y una barra baja.
Algo así: 2018-05-26_DSC0565.ARW. - Compruebo que el panel "Destino"
Me fijo en que esté seleccionado "Por fecha" y en "Formato de fecha" se muestre año y mes (por ejemplo 2018/05). - Añado las "Palabras clave"
Para terminar con esta ventana, aprovecho para introducir algunas palabras clave en el panel "Aplic. durante la imp.".
Podría hacerlo también posteriormente, de hecho añado más en el módulo "Biblioteca", pero si todas las fotos que voy a importar son de un mismo viaje o sesión o lugar o persona o cosa, aprovecho y escribo las palabras clave comunes a todas ellas.
En este caso todas las fotografías son de mi viaje a la capital de Portugal y la casi totalidad de ellas son callejeras, así que escribo las palabras clave: "Portugal", "Lisboa", "Viaje", "calle", "callejera".En otros casos, como cuando hago una sesión, escribiría: "retrato", "nombremodelo", "sesion", "lugarsesion", "temadelasesion"
Fíjate en que como te comenté en el capítulo correspondiente no escribo tildes (con todo el dolor de mi corazón), ni mayúsculas, los verbos en infinitivo y uso palabras bastante genéricas y descriptivas.
Y listo, pulsamos el botón "Importar".
Mientras se van importando
El proceso de importación tardará más o menos según la cantidad y tamaño de los archivos. Y si Lightroom tiene que crear o no las previsualizaciones 1:1 o las inteligentes.
En el panel "Catálogo" aparecerá un apartado que se llamará "Importación actual" y que cuando termine el proceso pasará a llamarse "Importación anterior". A veces, mientras eso va ocurriendo, me pongo a hacer otras cosas, como escribir en este blog o responder a tus comentarios y emails o cualquier otra cosa productiva como contarme los pelos de la barba.
Así que cuando ha pasado un ratillo, me voy a esa sección y voy haciendo una revisión rápida de las fotografías. En esta revisión lo único que hago es marcar como rechazadas (tecla "X" o bandera negra de la "Barra de herramientas inferior") las fotografías insalvables que no haya desmarcado en la interfaz de importación y algunas de las que tenga idénticas o en ocasiones las que al verlas no entienda ni por qué las hice.
Pongo las fotos en "Vista de Lupa" (doble click o "E") y voy pasándolas rápidamente, cuando hay alguna que me parece chunga la reviso, hago zoom si es necesario y la rechazo o no. En el caso de que haya varias iguales o muy parecidas, las comparo con la "Vista Encuesta" (N). Todos estos procesos ya los describí en el capítulo dedicado a la "Barra de herramientas".
Seguramente, antes de que yo termine, habrá finalizado la importación y la creación de previsualizaciones, si no es así espero un poco.
Eliminar las rechazadas
Una vez realizada la primera revisión elimino las fotografías que haya rechazado.
Para ello me voy al menú superior, en "Fotografía / Eliminar fotografías rechazadas...". Me recopila las fotos con banderita negra y me pide confirmación, que normalmente acepto.
Ahora continúo trabajando con las que queden.
Añadir palabras clave
En este punto toca ser un poco más específico con las palabras clave, así que voy revisando y una a una o seleccionando varias parecidas, añado etiquetas más concretas.
Por ejemplo, en el caso del viaje a Portugal que estoy usando para este capítulo, si hay personas en la foto añado "gente" o "retrato" en caso de que sea tal, si es un monumento o lugar significativo introduzco "monumento", "lugarquesea", "estatua". Si hay un color predominante, una acción concreta, un sentimiento, objetos relevantes, etcétera, voy añadiendo las palabras clave correspondientes.
Para que te hagas una idea te muestro algunas fotogafías con las palabras clave que les he añadido, ten en cuenta que las siguientes fotos aún no están reveladas...
Palabras clave: arbol, calle, callejera, contrapicado, gente, Lisboa, monumento, perspectiva forzada, Portugal, torre, torre de belem, viaje |
Palabras clave: calle, callejera, color, contraste, Lisboa, maika, mujer, negro, Portugal, puerta, retrato, rojo, sentar, viaje |
Así paso un entretenido rato etiquetando... quizás esta parte del proceso sea la más aburrida, pero es una de las que más control posterior me dan sobre mi archivo.
Quizás pienses que como yo tengo muchas fotos es normal que me entretenga en estas cosas, pero te recuerdo que yo también empecé en su momento teniendo un par de centenares de imágenes y ahora en uno de mis catálogos tengo más de 30.000 fotografías.
Hace tiempo cuando empecé a tener más imágenes de las que podía controlar, me las veía canutas para encontrar alguna en concreto, así que perdí varios días realizando lo que ahora te estoy diciendo que deberías hacer a ratitos. Si hubiese sido mínimamente organizado en ese sentido, no habría tenido que perder tantas horas etiquetando las miles de fotos que ya tenía (eso sí que fue un suplicio), sólo habría necesitado unos minutos cada vez que traía nuevas imágenes a mi ordenador. Así que eso es lo que hago siempre desde hace tiempo.
Una vez etiquetadas correctamente sigo con el proceso...
Añado a una colección (o varias)
Las fotografías, al importarlas se organizan en el ordenador de la manera que hayamos decidido, en mi caso en carpetas por cada año y dentro de ellas un directorio por cada mes. Pero en Lightroom las tenemos todas juntitas ordenadas (por defecto) por hora de captura (es importante tener bien la fecha en la cámara) y las tenemos disponibles en el panel "Catálogo" en el apartado "Todas las fotografías".
Para tenerlas separadas (dentro de Lightroom) por temáticas están las colecciones.
Ya las vimos en el capítulo correspondiente de este curso, aún así te recuerdo (escuetamente) que las colecciones sirven para agrupar conjuntos de fotografías bajo el criterio que decidamos y que una misma foto puede estar en varias colecciones al mismo tiempo sin necesidad de duplicar archivos.
Así que para cada viaje, sesión, serie, proyecto o cualquier otra cosa que se me ocurra creo "Colecciones" y "Conjuntos de colecciones" (que agrupan varias colecciones).
Por ejemplo tengo un conjunto para las fotos que uso en el blog y dentro una colección por cada artículo en el que utilizo fotos de mi catálogo. También tengo otro conjunto de colecciones llamado "Exposiciones", que contiene una colección por cada exposición en la que he participado. Y otras cuantas dedicadas a diferentes temas.
He ido creando colecciones y conjuntos de éstas según mis necesidades, con la tranquilidad de que por muchas que haya nunca tendré archivos duplicados y sí mucho control en la organización.
Para el caso de las fotos que estoy usando para este capítulo, todas pertenecen a mi viaje a Portugal, así que dentro del conjunto de colecciones "Viajes", añado una nueva colección llamada "Viaje Lisboa 2018".
Selecciono en la ventana principal (o en la tira de imágenes) todas las fotografías correspondientes y las arrastro a la colección que acabo de crear.
Si alguna de las fotos que he ido haciendo durante el viaje encaja en alguno de los proyectos o series que tengo en proceso, las selecciono y arrastro a su colección correspondiente. Esto lo puedo hacer ahora o posteriormente si me percato de que alguna foto encaje en alguna otra colección.
Lo siguiente lo hago en algún momento posterior en el que tenga un rato para ello...
Califico mis fotografías
Este proceso es muy personal, pero te lo describo para que lo tengas en cuenta por si a ti te vale.
Cada vez que puedo me pongo a puntuar mis fotografías con las estrellas (de 1 a 5), pero no las califico de un primer vistazo, sino que hago varias pasadas. Me explico...
Primero hago una primera revisión relativamente rápida en la que marco con una estrella las fotos que (por el motivo que sea) me gusten y dejo sin puntuar las que (por el motivo que sea) no me terminan de encajar pero no están mal echas (bajo mi criterio).
Para la segunda pasada utilizo el "Filtro de biblioteca" "Atributo" para que me muestre sólo las fotos con 1 estrella o más. Ahora voy un poco más tranquilo y marcando con 2 estrellas las que me gustan y no tienen ningún fallo (bajo mi criterio).
Repito el proceso del "Filtro de biblioteca" con el "Atributo" de 2 estrellas o más y puntúo con 3 estrellas las mejores.
Con el "Filtro de biblioteca" activo el "Atributo" 3 estrellas o más, con lo que ya no me quedarán ni la mitad del total de las fotos iniciales y marco con 4 estrellas mis favoritas de entre las que queden.
Si he marcado alguna con 4 estrellas, activo el "Atributo" 4 estrellas o más y marco con 5 estrellas las que me hacen sentir algo intenso cuando las veo o que creo que me pueden valer para alguna exposición, concurso o proyecto especial. Esto último ocurre en muy pocas ocasiones, pero sienta muy bien ver que alguna foto ha llegado a merecer 5 estrellas (siempre bajo mi subjetivo criterio personal).
Ya con este paso tendría todas mis fotografías organizadas, clasificadas, etiquetadas y calificadas. Con lo que el control sobre mi archivo fotográfico sería total.
Aún así falta por contarte alguna cosilla más...
Después de la importación
Una vez que termino de importar las fotografías hago las copias de seguridad, no hace falta que las tenga ya etiquetadas, clasificadas o calificadas.
Realizo 3 copias siempre, una copia se encuentra en un disco duro externo del ordenador con el que trabajo. La segunda copia en otro disco duro externo que tengo en mi habitación y que conecto y desconecto sólo para hacer copias cada vez que hago una nueva importación. Por último también tengo una tercera copia en la oficina (lejos de mi casa por si esta exportase o algo) que hago una vez al mes.
Además tengo todas las fotografías, que ya están reveladas, exportadas a JPG (ya explicaré el proceso en un capítulo del curso), éstas las tengo ubicadas en mi ordenador y en la nube en cuentas de Dropbox, Amazon Prime y Google Photos.
Y si pudiera tendría una copia más fuera de mi ciudad, pero no sé si mi mujer me enviaría al psiquiatra en este caso.
Una vez realizadas las dos primeras copias (en dos discos duros diferentes) ya me quedo relativamente tranquilo y paso a formatear la tarjeta de memoria. Aunque nunca tengo prisa por hacerlo y a veces espero hasta tener hecha la tercera copia (en mi oficina), ya que dispongo de tarjetas de memoria de sobra.
Etiquetas de color y banderas
Mi flujo de trabajo con las fotografías incluye el uso de otras herramientas disponibles en el módulo "Biblioteca". Te lo cuento por si a ti te valiese...
Por ejemplo las etiquetas de color, que voy añadiendo a las fotos según un esquema mental propio.
Marco con etiqueta verde las fotografías reveladas o retocadas.
Utilizo la etiqueta amarilla para las fotos que no he terminado de revelar o para las que me ha quedado la sensación de que puedo mejorar el revelado, ya sea a través de Lightroom o llevándolas a Photoshop.
La etiqueta azul la utilizo para las fotos que publico en alguna red social, por ejemplo mi Facebook o mi Instagram.
La etiqueta morada está reservada para las fotografías de trabajos que realiza mi mujer. Hace unos años eran unas espectaculares tartas, por sabor y aspecto y actualmente para su excelente trabajo de crochet en el que elabora unos peluches de amigurumi encantadores.
Por último la etiqueta roja es para las fotos que he utilizado en alguna exposición o que han resultado premiadas en algún concurso.
Las banderas blancas (P) las uso para varias cosas, como marcar las imágenes de una sesión que quiero enviar al cliente o al modelo.
A veces para eso mismo utilizo la "Colección rápida".
Y ya habríamos terminado
Creo que ya no me quedaría nada por contar de mi flujo de trabajo a la hora de llevar las fotografías a mi ordenador y a Lightroom. Aún así si te queda alguna duda ya sabes que me tienes en los comentarios.
Lo próximo sería revelarlas, pero sólo revelo las mejores (a partir de 3 estrellas) o las correspondientes a un encargo.
Esto del revelado es lo que iremos viendo en los próximos capítulos del curso de Lightroom. Veremos muchas cosas interesantes, como el histograma, los (famosos) Presets, las diferentes posibilidades que nos brindan las distintas herramientas y un largo etcétera. También aprenderemos a realizar copias de seguridad, a exportar nuestras fotografías o a publicarlas en redes sociales directamente desde Lightroom. Por último te explicaré un proceso de revelado que permite en tan sólo 10 pasos llevar casi cualquier imagen a un punto "correcto" y casi terminado. Además veremos diferentes maneras de revelar varias fotografías a través de casos prácticos.
Por el momento lo dejamos aquí, hasta próximo capítulo.
He de avisarte que voy a dejar la semana que viene sin capítulo del curso, hasta ahora se han ido publicando semanalmente, pero en esta ocasión dejaremos un hueco. Se debe a varios motivos, uno de ellos es que tengo que terminar otros trabajos relativamente urgentes y que me van a tener bastante liado.
Pero no hay mal que por bien no venga, esta pausa nos permitirá que quien se haya ido quedando rezagado se pongan al día y que tú y cualquiera de las personas que están siguiendo el curso puedan asimilar todo lo que hemos ido aprendiendo y plantearme todas las dudas que hayan surgido.
Pero no hay mal que por bien no venga, esta pausa nos permitirá que quien se haya ido quedando rezagado se pongan al día y que tú y cualquiera de las personas que están siguiendo el curso puedan asimilar todo lo que hemos ido aprendiendo y plantearme todas las dudas que hayan surgido.
Así que como siempre, recordarte que por muy liado que esté siempre dejo un hueco para responderte en los comentarios o mensajes que me envíes.
También, como viene siendo habitual, agradecerte que compartas en tus redes sociales mi trabajo, si éste te está resultando útil, así me ayudas a difundirlo.
12 comentarios
Hola de nuevo Carlos,
ResponderEliminarEstoy a punto de comenzar los capítulos referentes al revelado que si bien es cierto que puede ser más divertido y tengo ganas de comenzarlo, comparto contigo que lo principal que me atrajo de Lightroom es lo que se puede hacer en el módulo Biblioteca.
Ahora me falta interiorizar y automatizar los procesos que nos has enseñado.
Te quería hacer una consulta; tengo algunas fotos, no muchas, anteriores a la era digital que escaneé en su día. Estas fotos no tienen la fecha incrustada en los metadatos y no quedan en el lugar que les correspondería por la fecha.
¿Hay manera de solucionar esto? Es decir, ¿poner la fecha a estas fotos?
Gracias!!
Buenas, sí que es súper interesante todas las posibilidades en cuanto a organización que tiene Lightroom, yo le saco mucho partido a las funciones.
EliminarPara las fotos que me dices que tienes escaneadas puedes importarlas de la forma habitual y una vez las tengas en el módulo Biblioteca las vas seleccionando y puedes cambiar su fecha... ve al panel "Metadatos", junto a la sección "Hora de captura" verás un pequeño botón que al pulsar te abrirá una ventana emergente, en ella podrás ajustar la fecha y hora de captura. Después tendrás que moverlas (si quieres) a la carpeta de su fecha. Eso se hace en el panel de la izquierda llamado carpetas, localiza o crea una carpeta o varias carpetas para sus fechas y las vas seleccionando en la vista cuadrícula y desde allí las arrastras a la carpeta correspondiente.
Espero que te hayan quedado claras las explicaciones, que hoy estoy espesito. Si tienes alguna duda me cuentas y trato de explicarme mejor 😅👍
Explicado perfecto! Ya lo he hecho. Supuse que era en el panel metadatos pero me confundió encontrar "hora de captura" en lugar de "fecha" y creí que estaría dn otro sitio para introducir la fecha.
ResponderEliminarYa lo he cambiado y todo ok. Disculpa que sea un poco torpe y pesado. Muchas gracias!
Ni torpe ni pesado! Es normal que tengas dudas y yo siempre estoy encantado de poder ayudar, así que cada vez que necesites resolver algo no te cortes. 😁👍
EliminarHola Carlos, disculpa por hacerma pesado, pero dudas siempre las hay y las habrá, aunque muchas me espabilo en solucionarlas por mi cuenta, la mayoria de veces a base de ensayo & error (con lo que eso puede conllevar... a veces)
ResponderEliminarEn este punto, y aún estando casi todo el curso publicado, creo que merece la pena parar y recapacitar, probar, crear, borrar, importar... para que todo vaya quedándose fijado en la memoria, pero hay algo que me tiene intrigado.
En el capítulo de personalización y ajustes, una de las opciones de las preferemncias del programa es "Tratar los archivos JPEG junto a archivos RAW como fotografias independientes".
En las importaciones que he hecho, tenia la opción marcada, con lo que tengo en el (los) catálogo(s) fotos repetidas (lógico).
La duda es: si no se marca la opción, qué pasa? Lightroom sólo importa los RAW? importa los RAW + JPEG y los "junta" en una sola foto?
en esto no quiero "jugármela", pq son más de 5000 fotos raw y otras tantas de jpeg a las que añadir etiquetas, juntar en colecciones, etc... (Aclaro que tiro en raw+jpeg)
(porque raw+jpeg? para que te hagas una idea de la calidad de mis fotos, si no lo hiciera así, al salir de la cámara también los jpg, de mis raw ni yo mismo revelaria ni una... jajajajaj)
Perdona por el tocho,
Un saludo
Buenas, de pesado nada, es normal tener dudas y siempre estoy encantado de poder ayudar, además de que ahora me has pillado por aquí cerquita porque estoy trasteando en el blog y terminando un artículo nuevo, para mañana (espero).
EliminarTratando de responder a tu pregunta... Si desmarcas la opción "Tratar los archivos JPG junto a archivos RAW como fotografías independientes" lo que sucede es que en Lightroom tan sólo se te muestra una "copia" (ya sabes que nunca tocamos los originales directamente), pero en la carpeta de tu ordenador tienes ambos archivos. Los cambios que hagas sobre ese "espejo" se fijan sólo al exportar como habitualmente.
Las ventajas de hacerlo así son no tener imágenes por duplicado y conservar los originales en RAW y en JPG, con sus diferencias y particularidades.
En mis cursos de iniciación suelo recomendar que, al principio, se dispare en JPG+RAW, porque no todos disfrutan el revelado o no quieeren meterse en más fregaos, así que les vale con el JPG. Pero al tener el RAW si sale una foto especialmente buena o problemática, tendrán más flexibilidad en el revelado.
Son maneras de trabajar, cada uno debe elegir la que mejor se adapte a su ritmo e intenciones.
No te preocupes por los comentarios tochos, mejor decjar claras las cosas en muchas palabras que con imprecisiones por ahorrarlas.
Espero haberte resuelto la duda.
Un saludo.
Hola Carlos.
ResponderEliminarDices tu que eres un paranoico, pues mira yo que ademas de guardar tres copias en distintos discos duros, guardo las tarjetas originales, no las formateo, para reutilizarlas “Por si acaso” y eso que no me dedico a esto. (Una pasta en tarjetas, dice mi brujer).
Llegado este punto del curso me han surgido varias dudas.
1º.- Como te gano a “paranoico” cuando empece este ¡fantástico curso! y como nunca había usado el Lr, fije como ubicación de “almacenar ajuste preestablecidos con este catálogo” una provisional en el escritorio a la que llamé “catalogo de prueba”, pensando en ese momento que era la mejor forma de practicar si dañar nada. Pero claro entiendo que esa no es la mejor ubicación.
¿Puedo borrar esa ubicación y fijar otra? para empezar ya a organizar mis fotos en serio, es que como buen alumno quiero hacer lo que mi maestro y tener un solo catalogo. (Son unas 50.000 la mayoría casi para tirar, no la he revisado siquiera)
Y 2º.- ¿No sería conveniente hacer una copia de seguridad de esas carpetas? En mi caso y hasta ahora “catalogo de prueba” por si “peta” el ordenador poderlas tener al instalar Lr. en el nuevo porque entiendo que en ellas se guarda toda la información que suma el programa a la imagen (metadatos, banderas, estrellas, texto a medida, pie de foto etc.).
Tengo más pero poco a poco, que no es cuestión de contagiar mis neuras. Jajaja
Gracias otra vez.
Joaquín (El Cid)
Buenas Joaquín!
Eliminarme alegra saber que no soy el único obsesionado con las copias de seguridad de las fotos 😅 y no eres el primero que conozco que guarda las tarjetas de memoria, dicen que es un método bastante seguro y que no es proporcionalmente tan caro como parece.
1º Efectivamente, el escritorio del equipo no es una buena ubicación para ningún tipo de archivo, ahí solo deberíamos tener accesos directos... al menos eso me ha dicho alguna vez algún informático. Se supone que puedes mover sin problema ese catálogo a otra ubicación sin afectar a Lightroom, lo único que tienes que hacer es, una vez en la nueva ubicación, localizar el archivo con la extensión .lrcat y abrirlo. Se te abrirá Lighroom con ese catálogo y ya con la nueva ubicación del resto de cosas. Eso sí, recuerda que lo que estás moviendo son archivos de configuración, vistas previas y cosas por estilo. Las fotos las tendrás ubicadas donde sea que le dijeses a Lightroom que las pusiese a la hora de importarlas.
2º En el catálogo se guardan cosas para que Lightroom funcione, los metadatos y demás se guardan en el archivo sidecar, el xmp que aparece junto a los raws. De todas formas, sí te recomiendo hacer copia por si acaso. Cuando veas que todo está correcto y funciona bien, pues lo puedes borrar si quieres.
Y haz todas las preguntas que quieras, como siempre, estoy encantado de ayudar!!
Un saludo!!
Muchas gracias por las repuestas, dudas aclaradas. 👏🏼
EliminarLo de las tarjetas me hago la cuenta que son como los carretes de antes, asi que aun me ahorro el revelado 😉🤑.
Repito muchas Gracias.
Un Saludo.
Joaquín (El Cid Preguntador)
Hola Carlos, primero que todo agradecerte el esfuerzo y el conocimiento que pones a nuestra dispocisión, es imprisionante felicidades!!
ResponderEliminarMe surgio una pregunta la copia de seguridad la haces desde el programa LightRoom o lo haces directamente del sistema operativo ( windows,mac...) es decir vas directamente donde creaste los documentos (copiar y pegar) o generas una copia de seguridad desde LightRoom.
Muchas gracias por todo Carlos, un abrazo Gabriel.
Buenas y gracias, me alegra que te esté gustando mi trabajo.
EliminarRespecto a tu duda, ten en cuenta que la copia de seguridad que se hace desde Lightroom (esa que salta a veces al cerrar el programa) es sólo de las previsualizaciones y de la configuración, además de que sirve para optimizar el catálogo, pero de los archivos originales no se hace copia por ese método. Para realizar una copia de seguridad de los archivos originales debes hacerlo desde fuera de Lightroom o, como dices, desde el sistema operativo. En mi caso las copias de seguridad las tengo programadas y automatizadas a través de un programa bastante antiguo pero todavía muy efectivo que se llama "Cobian Backup".
Espero haberte resuelto la duda!
Vale ya me quedo claro, muchas gracias Carlos!
EliminarAl dejar tu comentario no olvides marcar la casilla "Avisarme" si quieres que te llegue una notificación cuando te contesten.